La historia de los sellos postales cortados por la mitad
El Vineta temporal es una rareza filatélica popular y representa la más famosa reducción a la mitad de edición de Alemana. Los sellos ahora se ofrecen en subastas de entre 3.000 a 15.000 euros. En el catálogo de Michel, el precio es de 13,000 / 10,000 euros sin estampar / cancelar.
En 1901, la colonia alemana de Nueva Orleans, se dispuso a celebrar el cumpleaños del Emperador Guillermo II, y organizaron una gran fiesta, a la que invitaron a los personajes importantes de la ciudad, a todos los ciudadanos alemanes residentes allí, y a la tripulación del crucero alemán “Vineta”, anclado en puerto, que estaba en recorrido amistoso por los países de Norte y Sudamérica. El capitán del navío dejó algunos hombres de guardia y el resto de la marinería asistió a la fiesta.
El acto quedó muy lucido. Hubo whisky y vino en abundancia, el baile estuvo animado y los marinos del “Vineta” pasaron una noche inolvidable. Los reporteros y fotógrafos de los periódicos informaron ampliamente sobre el evento, y cuando el “Vineta” levó anclas dos días después, la mayoría de los marinos llevaban ejemplares de los periódicos que reseñaban la fiesta, como recuerdo, y para enviarlos a sus familiares en la patria lejana.
El próximo puerto que tocó el crucero fue Pernambuco, en Brasil.
Cuando la nave arribó, llevaba gran cantidad de correspondencia para ser despachada a Alemania. Los marinos habían preparado los periódicos de Nueva Orleans para enviarlos por correos a sus familiares, y aquí surgió una dificultad. El cajero del barco Oberzahlmeister tenía suficientes sellos de 5, 10 o más peniques para franqueo de cartas o paquí postales, pero le quedaban muy pocos de 3 peniques para franquear periódicos. Así pues, tuvo otro recurso que dividir verticalmente en dos partes iguales de sellos de 5 peniques, y con gomígrafo que confeccionó, ponerles una sobrecarga de 31 peniques a cada mitad.
La correspondencia así franqueada se expidió en abril de 1901, y cuando llegó a causó cierto revuelo entre los funcionarios de correos. El Ministro de Correos y el Almirantazgo alemán, reunidos en conferencia, anunciaron oficialmente que quedaba terminantemente prohibido seccionar sellos y usarlos así con carácter temporal.
Las comunicaciones en aquella época no permitieron que esa orden fuera recibida por el “Vineta” hasta cinco meses después. De modo que, no habiendo recibido tampoco provisión de sellos de 3 peniques, se siguieron usando los biseccionados hasta el mes de Septiembre.
Los coleccionistas, especialmente los alemanes, comenzaron a cazar los sellos biseccionados del crucero “Vineta”. Aunque la emisión había sido provisional y no autorizada, fue producto de una necesidad perentoria, y los sellos franquearon realmente correspondencia, por lo cual es reconocida como legítima e incluida en todos los catálogos.
De esa emisión se han encontrado numerosas falsificaciones, pero los sellos genuinos fueron usados solamente a bordo del “Vineta”, y todos fueron cancelados con el mismo matasellos denominando un Departamento naval alemán.
Parte de las 600 secciones o mitades de sellos, quedaron sin usar, y algunos ejemplares muestran la sobrecarga de 3 peniques invertida, seguramente por descuido del cajero del “Vineta”. Estos últimos, naturalmente, tienen un precio más elevado en los catálogos.
No hay comentarios: